En el año 1980 L. Auer, hace la clasificación de grupos sanguíneos en el gato, determinando la presencia de tres grupos que denomina A, B y AB.
Estos grupos están regidos genéticamente, siendo el gen para el grupo A, dominante sobre el gen para el grupo B, se cree que habría un tercer alelo que produciría la presentación del grupo AB (extremadamente raro) en el cual encontraríamos una codominancia de A y B.
Según algunos estudios de prevalencia de anticuerpos, los gatos con grupo B pueden tener naturalmente anticuerpos (aloanticuerpos o isoanticuerpos) fuertes anti A y los del grupo A pueden tener también anticuerpos anti B, pero más débiles o menos agresivos. En los gatos del grupo AB, no se han detectado ningún tipo de aloanticuerpos.
En consecuencia los gatos del grupo B no deben recibir transfusiones de sangre del tipo A, porque destruirían todos los glóbulos rojos que están recibiendo. En el caso de cachorros grupo A que tienen madres grupo B, también se producirían graves inconvenientes como veremos más adelante.
Distribución entre razas
Se ha observado que la mayor parte de los gatos domésticos ( de raza indefinida o tipo europeo) tienen una incidencia de más del 95 % de sangre tipo A, y en algunas regiones puede llegar al 98 %. Sin embargo la situación cambia en gatos de raza como vemos en el siguiente cuadro.
Frecuencia del tipo B | Razas | |
0 a 5 % (bajo riesgo) | Americano de pelo corto, Siamés, Burmés, Maine Coon Bosque de Noruega, Doméstico. | |
6 a 25 % (mediano riesgo) | Persa, Himalayo, Somalí, Abisinio, Sphynx, Scotish fold, Bobtail Japonés, Birmano. | |
26 a 50 % (alto riesgo) | Británico de pelo corto, Cornish Rex, Devon Rex. | |
El nivel de riesgo está dado por la posibilidad de tener reacciones de incompatibilidad sanguínea ya sea en transfusiones o en neonatos.
Los anticuerpos en el calostro
La primer secreción láctea en todas las especies mamíferas es el calostro y se caracteriza por contener una elevada cantidad de anticuerpos de todo tipo. Estos pasan al cachorro en los primeros días de lactancia y por la gran permeabilidad intestinal pasan directamente al organismo del gatito comenzando a cumplir su función protectora, la mayoría son anticuerpos contra microorganismos ambientales y vacunales. Esta absorción de anticuerpos solo ocurre durante las primera 24 hs. de vida en el gato (según Hoskin en las primeras 16 hs. de vida) luego el intestino pierde permeabilidad y las proteínas son destruidas (digeridas) y absorbidas como péptidos y aminoácidos.
Como vimos, los anticuerpos maternos protegen al cachorro de los gérmenes patógenos ambientales, pero dentro de este pool, también se encuentran aloanticuerpos que pueden producir trastornos y hasta la muerte del cachorro si hay incompatibilidad de grupos sanguíneos entre la madre y el hijo.
El problema aparece cuando la madre es grupo B y el cachorro es grupo A, esto se puede producir si el padre es grupo A como vemos en el siguiente diagrama.
Como el gen para el grupo A es dominante sobre el B, los hijos de un padre A homocigota (AA) serán todos tipo A, pero heterocigotas (AB), si el padre es A heterocigota tendrán un 50 % de hijos tipo A (heterocigotas) y un 50 % de hijos B (éstos solo pueden ser homocigotas BB).
Si el cachorro con tipo A, recibe calostro de la madre tipo B, recibirá los aloanticuerpos anti A de la madre que al pasar a la sangre del gatito, destruirán sus glóbulos rojos tipo A. Los cachorros con grupo AB también pueden tener problemas con madres tipo B.
Muerte Neonatal
En un estudio realizado en USA hace varios años, se encontró que alrededor de un 10 % de los gatitos nacidos vivos, morían entre el primer y segundo día de vida. Estas muertes se atribuyeron a factores genéticos (malformaciones), nutricionales, ambientales (temperatura), mal manejo materno etc. sin tener en cuenta la posibilidad de la incompatibilidad sanguínea.
En este momento con los últimos conocimientos sobre el tema de los grupos sanguíneos en el gato hay que reveer las causas de las muertes neonatales, ya que muchas de estas pueden deberse a la incompatibilidad sanguínea.
El gatito que muere por esta causa, nació en perfecto estado de salud y mamará normalmente el primer día y posiblemente el segundo también, pero al hacerlo irá recibiendo los aloanticuerpos responsables de su enfermedad, que se denomina Isoeritrólisis Neonatal Felina (INF)
Es muy importante hacer la tipificación sanguínea del gato en especial si es un animal de criadero y está en etapa reproductiva, no obstante si todavía no se lo ha hecho, y aparecen muertes de cachorros en los primeros días de vida, es fundamental hacer las necropsias correspondientes para determinar la causa de la muerte, en muchos casos se hallarán signos de la INF .
Isoeritrólisis Neonatal Felina
La INF es un síndrome que se produce en los gatitos al recibir aloanticuerpos incompatibles con su grupo sanguíneo. En especial cuando la madre es tipo B y los cachorros tipo A. Estos anticuerpos actúan rápidamente destruyendo los glóbulos rojos del cachorrito, la intensidad de esta destrucción depende de la cantidad de anticuerpos recibidos y absorbidos por el cachorro, debido a esto se han observados tres respuestas distintas en el cachorrito.
2- Muerte dentro de la primer semana con signos clínicos como depresión, disminución de la succión, eliminación de orina roja oscura (como con iodo), ictericia y anemia severa.
3- Algunos cachorros pasan la enfermedad en forma subclínica, presentando solamente una típica necrosis de la punta de la cola . Esto aparece al nivel de las 2 o 3 últimas vértebras y se observa la piel seca y dura y la cola en este sector mas fina que el resto, luego se perderá esta porción y quedará una cola más corta.
Recomendaciones finales
** Tipificar el grupo sanguíneo de todos los gatos de la casa, en especial si es un criadero.
** Evitar cruzar hembras B con machos A.
** Si el cruzamiento anterior es inevitable, se deber n sacar los cachorros de la madre al nacer y suministrarles leche artificial o una madre sustituta con tipo A, por lo menos durante tres días.
** Si el cachorro tiene signos clínicos de incompatibilidad, hay que retirarlo inmediatamente de la madre y probablemente se le deber hacer una transfusión de sangre tipo A. Una alternativa es utilizar eritrocitos aglomerados. En estos pacientes está indicada la vía intraosea en el fémur a través de la fosa trocantérea. La dosis está alrededor de los 2-4 ml/0,100 kg/ día. Se puede utilizar corticoides parenterales y oxigenoterapia.
** Por último una recomendación para cualquier caso de muerte neonatal, es imprescindible hacer la necropsia del cachorro para determinar la causa, ya sea por incompatibilidad o cualquier otro motivo.
Fuente: http://www.aamefe.org